s/c...

Se ha metido la pata
y se ha metido hasta el fondo,
yo he metido la pata
algunas veces
pero tú has fracasado
horriblemente,
el error estaba ayer
por la tarde
entre tus manos,
bajo tus labios,
y en ambas pupilas
cayéndose,
en la yema de tus dedos
tamborileando en la mesa,
ella, la inocente,
justo antes que llamaras
a la puerta,
y saliera mi mujer
a responderte,
incluso antes de que
dejaras en sus manos,
esa bolsa con dulces
artesanales,
perfectamente
pudiste avisarme,
de tus planes
para hacerte
la mosquita muerta.








Me sorprendieron cruelmente
tus halagos,
me dieron a entender c/ caramelos
hechos a mano,
y envueltos
en unas
estupendas
bolsitas plásticas
translúcidas,
cosas que jamás creí
que creería

me fastidiaron
esos dedos, esos hombros
ultra delgados, tu cabello,
y esa sonrisa honesta
que me extendiste,
me intimidaron
tus buenos modales
y tu aparente preocupación
por algunos sucesos tristes
que han dejado marca

me fue mal por la tarde,
cuando me enteré de lo
que realmente pensabas,
me bajó una tristeza
inconmensurable,
una pena milimétrica,
como el disparo que
en medio de la oscuridad,
dispersa inútilmente una bandada.



…